La formación en línea ha experimentado un crecimiento significativo en los últimos años, ya que cuenta con numerosos beneficios en términos de accesibilidad, flexibilidad y ahorro de tiempo. Sin embargo, a pesar de estas ventajas, un dato preocupante ha surgido: la tasa de abandono en la formación online se sitúa en el 62%, en comparación con solo el 27% en la modalidad presencial.
Esta diferencia plantea la necesidad de encontrar estrategias efectivas para retener a los estudiantes y garantizar que completen con éxito sus programas de estudio. En este artículo, presentaremos seis estrategias clave diseñadas para reducir la tasa de abandono, brindando a los formadores online herramientas prácticas que promuevan la motivación en los estudiantes para que finalicen sus formaciones online con éxito.
1. Orientación centrada en el estudiante
Principalmente, la formación debe estar enfocada en el estudiante en sí mismo, en lugar del contenido, el formador o la tecnología.
En este sentido, los docentes y creadores de cursos en línea deben proporcionar una formación de calidad que se adapte a los intereses de los estudiantes, reconociendo que ellos son los responsables de su propio aprendizaje.
2. Seguimiento y apoyo continuo
Es esencial brindar a los estudiantes un seguimiento activo y apoyo constante. No se les debe dejar solos en su proceso de aprendizaje, ya que buscan orientación y sentirse acompañados.
De esta forma, se puede fomentar un sentido de progreso, permitiendo a los estudiantes completar su formación exitosamente y evitar el abandono en la formación online.
3. Metodologías pedagógicas activas
Por otra parte, es importante utilizar metodologías en línea específicas y adecuadas para el entorno digital. Es decir, no se puede simplemente copiar y pegar lo que se realiza en la formación presencial.
Entre los métodos de aprendizaje activos que se pueden emplear, se encuentran:
- Enfoque de clase invertida: los estudiantes adquieren conocimientos previamente fuera del aula y luego utilizan el tiempo en clase para actividades prácticas y de discusión, fomentando la participación activa y la aplicación del conocimiento.
- Aprendizaje social: se promueve la interacción y colaboración entre los estudiantes, permitiéndoles aprender unos de otros, compartir ideas y experiencias, y construir conocimiento de manera colectiva.
- Resolución de retos o proyectos: se plantean desafíos o proyectos prácticos que exigen a los alumnos aplicar y desarrollar sus habilidades y conocimientos, fomentando así el aprendizaje basado en la resolución de problemas reales.
- Gamificación: Se utiliza el diseño de juegos y elementos lúdicos en el proceso de aprendizaje, con el objetivo de motivar a los estudiantes, generar un ambiente de competencia positiva y aumentar la participación y la retención de conocimientos.
Además de utilizar estas metodologías, adaptar los módulos o temas a las necesidades de los estudiantes también contribuye al éxito del aprendizaje y a reducir el abandono de la formación online.
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4. Fomentar la participación
El aprendizaje se logra a través de la acción. Esto quiere decir que los docentes no deben limitarse a transmitir conocimientos, sino que deben actuar como facilitadores. Para promover la participación, se deben establecer desde el principio expectativas claras y crear una cultura de aprendizaje.
En este sentido, se pueden emplear preguntas, dinámicas, retos y grupos de trabajo para incentivar a los estudiantes a hablar y participar activamente.
5. Utilizar materiales multisensoriales
Presentar un extenso PDF o un aburrido y monótono PowerPoint en una plataforma de e-learning no es la opción más adecuada. Para dinamizar los cursos y formaciones en línea, es recomendable utilizar materiales multisensoriales en diversos formatos, como vídeos, audios, textos, artículos, infografías y actividades interactivas.
De hecho, es importante ser creativo, investigar y probar diferentes formas de presentar la información. No se debe confundir la cantidad de texto y contenido con la calidad de la formación. En muchas ocasiones, menos es más.
6. Experiencias de aprendizaje personalizadas
El 70% del conocimiento se adquiere a través de la experiencia, lo que implica fomentar la participación e interacción entre los estudiantes. Para ello, es esencial abandonar los enfoques tradicionales de formación online, centrados en conocimientos teóricos y actitudes pasivas o repetitivas por parte de los estudiantes.
En su lugar, se debe priorizar la creación de experiencias de aprendizaje enfocadas en aspectos prácticos, lo que fortalecerá el conocimiento adquirido.
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